La ciudad de La Quiaca vivió una jornada cargada de emoción y cultura durante el XVI Encuentro Internacional de Escritores, realizado en el Club Social, con la participación de autores provenientes de Alemania, México, Perú, Bolivia y distintas provincias argentinas. En el marco de este importante evento literario, el intendente Dante Velazquez encabezó el acto de reconocimiento a la escritora jujeña Graciela Joaquín, quien fue declarada Persona Ilustre por el Gobierno Municipal, en mérito a su trayectoria, compromiso con la palabra y representación del norte argentino en escenarios internacionales.
Durante el acto, la diputada provincial Alejandra Elías hizo entrega de una distinción especial en nombre de la Legislatura, destacando que Joaquín “lleva la voz del altiplano al mundo, narrando desde la raíz, con el corazón de su tierra y la sensibilidad de su pueblo”. También estuvieron presentes la presidenta del Concejo Deliberante, Lic. Mirtha Moscoso, y la concejal Trinidad Taboada, quienes entregaron la minuta de declaración que oficializa el reconocimiento y remarcaron el valor del encuentro en el fortalecimiento del patrimonio cultural puneño.
El profesor Mario Fidel Tolaba, organizador del evento, resaltó la importancia de vincular la literatura con el territorio, señalando que “el contacto con los niños, las escuelas, los libros y los visitantes nos hace volver a sentirnos parte de algo más grande”. En tanto, el intendente Velazquez agradeció el trabajo del equipo organizador y reafirmó el compromiso de su gestión con la cultura, subrayando que “la palabra escrita es el alma de los pueblos” y que homenajear a Graciela Joaquín es reconocer el talento de todos los creadores de la región.

La ceremonia contó también con la participación del embajador cultural Kike Teruel, quien acompañó la entrega de diplomas a los escritores y destacó la relevancia del encuentro dentro de la Manka Fiesta 2025, afirmando que “La Quiaca está construyendo un puente entre la cultura ancestral y la contemporánea”. El cierre fue una verdadera celebración de la palabra, con lecturas, coplas y aplausos que reafirmaron a La Quiaca como capital cultural del norte argentino.